En el capítulo 43 de Una Nueva Vida, la tensión en la mansión se dispara cuando Kazim descubre que Sultan le dio a Seyran unas píldoras para evitar que quedara embarazada. Furioso, Kazim recorre la casa gritando el nombre de Sultan, y los miembros de la familia salen alarmados a la sala, sorprendidos por el escándalo. Kazim no solo acusa a Sultan de traición, sino que sospecha que no actuó sola, lo que aumenta su furia y desconfianza.

İfakat intenta calmar la situación explicando que ella despidió a Sultan al enterarse de su acción motivada por envidia hacia Seyran, y asegura que tomó la decisión adecuada para proteger a la familia. Sin embargo, Kazim sigue dudando y no puede evitar pensar que hay más detrás de esta conspiración.

Por otro lado, Ferit llega a la mansión confundido por la noticia del embarazo de Pelin, pero pronto se ve envuelto en la tormenta causada por Kazim, quien le recrimina no haber protegido a Seyran y exige que la joven deje la universidad para tener un hijo y asegurar el legado de la familia Korhan. Esta actitud despiadada genera un choque entre Ferit y Kazim, que solo es detenido por la intervención de familiares.

Mientras tanto, Sultan planea alejarse con Latif para proteger a Dicle, quien ya no está segura en la mansión. En privado, Kazim presiona a Seyran para que abandone sus estudios y se comprometa a ser madre, poniendo su felicidad y deseos en segundo plano.

Seyran se siente atrapada y sola, mientras Ferit lucha con sus propias emociones. En una salida nocturna con Abidin, Ferit confiesa su miedo y a la vez su inesperada alegría por la idea de ser padre, aunque la sombra del embarazo de Pelin sigue pesando en su mente.

De regreso en casa, Seyran encuentra a Ferit ebrio y abatido. Cuando Ferit murmura palabras confusas sobre Pelin y su bebé, İfakat escucha y comprende que tiene en sus manos un secreto que podría destruir la frágil estabilidad familiar. Mientras tanto, Sultan y İfakat protagonizan un tenso enfrentamiento donde salen a la luz secretos peligrosos que pondrán a prueba la lealtad y la verdad en la mansión.

En este capítulo, la tensión dentro de la mansión Korhan alcanza un punto crítico. İfakat, tras silenciar a Sultan con una amenaza física, recupera momentáneamente el control de la situación, mientras que Sultan, atrapada entre las presiones de Kazim e İfakat, acepta regresar a la mansión. Sin embargo, al volver, Kazim la lleva a un cuarto aislado y, con una mirada dura, la confronta hasta que Sultan confiesa que sintió una fuerte atracción por Ferit, que derivó en una profunda envidia hacia Seyran, y que esa emoción la llevó a actuar en contra de ella. Esta revelación deja a Kazim paralizado, consciente del daño que puede causar, pero ordena que el tema no se mencione más y que Sultan se vaya sin hacer ruido.

Mientras tanto, Seyran sufre la creciente presión de Kazim, quien insiste en que debe abandonar la universidad y quedar embarazada lo antes posible, no solo para cumplir con la tradición familiar, sino como una estrategia para asegurar el poder dentro de la familia Korhan. Ferit, aunque parece apoyar a Seyran externamente, guarda en su interior dudas y secretos que afectan su relación.

En medio de este caos, Seyran se siente cada vez más sola y vulnerable, pero encuentra un apoyo silencioso en Gülgün, quien promete estar a su lado y busca descubrir la verdad detrás de las acciones de Sultan.

Por otro lado, Ferit, abrumado, intenta evadir la realidad y, tras una noche fuera con Abidin, regresa ebrio a la mansión, revelando sin querer que sabe del embarazo de Pelin. Este detalle es captado por İfakat, quien comprende que tiene en sus manos un secreto capaz de desestabilizar aún más la ya frágil familia.

El capítulo termina con el inicio de un nuevo y complicado enfrentamiento entre los personajes, donde la verdad, las traiciones y las lealtades serán puestas a prueba.

En este capítulo, se revela una transformación importante en la relación entre Kaya y Suna. Detrás de la delicadeza de Suna, Kaya descubre a una mujer fuerte y decidida, y lo que parecía un matrimonio por compromiso comienza a llenarse de emociones genuinas, iniciando un vínculo que crece lentamente. Sin embargo, en la mansión Korhan, Halis Korhan se enfurece al enterarse, por Nükhet, de que Seyran estuvo tomando anticonceptivos y que Sultan estuvo involucrada. Para él, esto no solo es un escándalo, sino una ofensa directa al honor de la familia, lo que desata una dura confrontación con İfakat.

İfakat intenta justificarse recordando que la decisión de que Seyran tomara las pastillas se tomó para evitar complicaciones, pero Halis Korhan no tolera la traición y la expulsa de la sala, mientras İfakat planea nuevos movimientos para debilitar aún más a Seyran y Nükhet.

En medio de esta crisis, Ferit acompaña a Pelin a sus consultas prenatales, sintiéndose futuro padre, pero su mente está dividida entre Pelin y Seyran, sintiendo que en su corazón aún hay espacio solo para Seyran. Por otro lado, Gülgün consigue dinero para desenmascarar a Sultan, con un plan que se despliega en una tensa reunión entre ambas.

Mientras tanto, İfakat aprovecha una pelea entre Kaya y Suna para acercarlos emocionalmente, entregándoles un ungüento para las heridas de Kaya, lo que desencadena una inesperada tensión entre ellos, que termina en un beso abrupto, interrumpido por la furia de Kazim, quien ve esa escena como una humillación personal y rompe con Kaya.

Finalmente, Seyran confronta a Sultan en una conversación dura donde salen a la luz traiciones y secretos que amenazan destruir la confianza y el amor que la sostienen. Decidida, Seyran llama a Ferit para enfrentar juntos esta verdad, con la presencia de Sultan, marcando un punto decisivo para su matrimonio y su futuro.