Los días que se avecinan en Sueños de Libertad estarán marcados por revelaciones profundas, decisiones arriesgadas y una tensión creciente que sacudirá todos los pilares emocionales de los personajes. Entre intrigas familiares, confesiones inesperadas y relaciones que tambalean, las verdaderas intenciones de Pelayo comienzan a salir a la luz, desencadenando una tormenta que nadie podrá frenar.

Tras los extraños acontecimientos vividos en la casa del bosque, Begoña lucha por ocultar su inquietud. Decide sincerarse con Andrés, quien intenta restarle importancia, aunque ambos saben que lo vivido fue demasiado intenso como para ignorarlo. Begoña, sin embargo, ha notado algo que no puede quitarse de la cabeza: la conexión especial entre Marta y Fina. Andrés intenta tranquilizarla, pero hay un aire de sospecha que ya no puede disiparse.

Mientras tanto, Claudia empieza a notar cambios en la actitud de Manuela. Pronto descubre que su amiga está atravesando una crisis con Gaspar: una decisión importante la consume por dentro, y aún no se atreve a dar el paso. A la par, Andrés le comunica a Begoña un cambio crucial que está por hacer en relación con Julia. Él cree que es el único modo de frenar a María y proteger a la niña. Pero cuando habla con Julia, la reacción de la pequeña no es la esperada y genera gran preocupación, especialmente en Begoña.

Gema, por su parte, se enfrenta a uno de los retos más importantes de su vida: asumir un nuevo rol maternal con el pequeño Teo. Aunque el niño se resiste a separarse de su tío Marcial, poco a poco acepta la posibilidad de un futuro junto a Joaquín y Gema. A pesar de las tensiones previas, Marta y Fina logran una tregua emocional. Sin embargo, el cambio en la actitud de Begoña hacia Fina empieza a despertar nuevas inquietudes.

Fermín y Javier logran un acercamiento gracias a Irene. Ambos hombres reconocen lo mucho que necesitaban reconciliarse. Don Pedro, entusiasmado por su próxima boda, comparte su alegría con Claudia y Carmen, aunque Claudia, aún afectada por las muertes de Mateo e Inés, no puede evitar mostrarse distante. Pedro le sugiere que se abra nuevamente al amor.

En otro rincón del drama, Damián se sincera con Andrés: siente que perderá a Digna para siempre ahora que ha decidido casarse con Pedro. Pero Digna tampoco logra encontrar paz. Tras hablar con Damián, le confiesa a Pedro una duda dolorosa: ¿fue ella la causa del suicidio de Inés? Pedro comienza a ver con otros ojos a su rival y sospecha que Damián podría tener un lado mucho más oscuro del que imaginaba.

Andrés, decidido, comunica a su padre los cambios que se avecinan en la custodia de Julia. Pero es Marta quien sorprende a Begoña al confrontarla directamente. El intercambio entre ambas mujeres deja a Marta desconcertada. Mientras tanto, Manuela toma una decisión drástica sobre su relación con Gaspar, sorprendiendo a todos con su determinación.

María se desmorona poco a poco. Siente que el control se le escapa de las manos, su soledad crece y su conducta se vuelve cada vez más peligrosa. Luz le confiesa a Begoña que su relación con Luis está en crisis, mientras que Pedro insiste en invitar a Damián a su boda, lo que termina en un violento enfrentamiento presenciado por Inés. Por primera vez, Inés comienza a cuestionar quién es realmente su hermano.

Damián, por su parte, se encuentra con el detective privado, quien le entrega una bomba: un oscuro secreto del pasado del clan Carpena relacionado con Irene. Con esta información, Damián pone en marcha una estrategia para acercarse a Irene. Pedro comienza a notar algo extraño en su comportamiento y se inquieta por la cercanía entre ambos.

Raúl encuentra a María devastada por el alejamiento de Julia. Al intentar consolarla, María lo rechaza fríamente. Tacio aconseja a Luis consultar a las empleadas de la tienda sobre el nuevo perfume, pero Luis, arrogante, las ignora, lo que no hace más que profundizar su crisis profesional. Mientras tanto, María, más manipuladora que nunca, vuelve a sembrar dudas en Julia sobre Andrés y Begoña. Abrumada, la niña escapa de casa.

Raúl, herido por su último desencuentro con María, se refugia en el alcohol. Claudia intenta apoyarlo, pero sufre al ver que su corazón sigue aferrado a otra. La desaparición de Julia pone a María contra las cuerdas. Aunque lo oculta al principio, finalmente confiesa lo sucedido a Manuela. Begoña pronto se entera de la verdad y corre a buscar a la niña.

Gema, Joaquín y Teo llegan al hogar de los Merino. Aunque son recibidos con afecto, Teo necesitará tiempo para adaptarse. En una cena organizada para-Fermín, Irene aparece y su conexión con él es evidente. Sin embargo, Fermín evalúa tomar un cambio radical en su vida.

Begoña logra encontrar a Julia, y su presencia devuelve la calma. Digna le confiesa a la niña que pronto se casará. Julia, al principio feliz, se entristece al recordar la tragedia familiar de la última boda. Andrés oficializa su decisión sobre la custodia de Julia, lo que deja a Damián en shock. Poco después, Digna irrumpe exigiendo respuestas y madurez.

Teo y Julia chocan durante el desayuno en casa de los Merino. El malentendido entre ambos provoca nuevas tensiones, y Gema comienza a temer que la integración no será fácil. Pedro, por su parte, intenta esconder sus celos al enterarse de la cena entre Irene, Fermín y Damián. Irene comienza a alejarse emocionalmente de su hermano, cansada de sus manipulaciones.

Begoña se entera finalmente de la razón detrás de la huida de Julia y confronta a María con determinación. Le deja claro que no tolerará más daño. María, celosa, presencia un momento íntimo entre Raúl y Claudia, lo que la impulsa a reanudar su relación con el chófer con fines manipuladores. Lo seduce durante una clase de manejo, intentando reafirmar su dominio sobre él.

Joaquín, abrumado por su rol como padre, busca consejo en Luis. La adaptación de Teo está siendo muy difícil. La situación empeora cuando Joaquín le revela a don Agustín que ya no planean adoptar al niño, y pide la devolución del dinero entregado. El sacerdote queda consternado.

Mientras tanto, Pelayo empieza a desconfiar del creciente vínculo entre Andrés y Marta, especialmente cuando esta le confía el futuro de Fina. Sus celos y ambición lo llevan a enfrentarse abiertamente a Marta. Aunque ella intenta calmarlo, su rechazo a un viaje de negocios con él lo enfurece aún más. Damián comienza a percibir el peligro que representa esta tensión.

Digna hace esfuerzos por conectar con Teo, pero el niño sigue reacio. Pedro, al enterarse de que Damián tiene la custodia de Julia, aprovecha para desprestigiarlo, aunque esta vez Digna lo detiene en seco. Aun así, Pedro ve una oportunidad para reforzar su poder en la empresa.

La relación entre María y Raúl continúa encendida, pero mientras él se entrega con sinceridad, para ella es solo un juego. Luis, agobiado, finalmente escucha los consejos y trabaja con humildad junto a las dependientas, recuperando terreno profesional. Fermín, por su parte, se despide con emoción de Begoña y Luz, listo para cerrar un ciclo y empezar de nuevo.

En la tienda, Carmen y Claudia intentan ayudar a Francisca, cuya familia ha sido afectada por el desempleo. Luis presenta su nueva fórmula de perfume, pero la reacción de sus compañeras no es la que esperaba…

Y mientras todo esto ocurre, las verdaderas intenciones de Pelayo comienzan a brillar con una claridad peligrosa. ¿Está dispuesto a destruir todo para conseguir lo que quiere? En Sueños de Libertad, las máscaras caen… y nadie saldrá ileso.

¿Quieres que prepare el avance siguiente con un enfoque especial en Pelayo y Marta?