En esta intensa semana de Sueños de Libertad, del lunes 16 al viernes 20 de junio de 2025, los conflictos, los secretos y las decisiones emocionales marcan el rumbo de cada personaje en la colonia, revelando las grietas que ya no se pueden disimular.

El estado de salud de María conmueve profundamente a Raúl, quien, cegado por la impotencia y el dolor, no tarda en responsabilizar directamente a Andrés por su deterioro. La tensión entre ambos hombres se dispara como una chispa que amenaza con encenderlo todo, hasta que Manuela interviene para contener el desastre. Tras el enfrentamiento, tanto ella como Andrés intentan comprender la actitud del chófer, y sospechan que María ha manipulado la situación para hacer creer que fue empujada, generando aún más inestabilidad. Manuela, siempre racional, intenta advertir del peligro de encender aún más la furia de Raúl, pero el daño ya está hecho.

Mientras tanto, en el laboratorio, Cristina comete un error fatal: en su afán de innovar, arruina una muestra crucial para Cobeaga. Luis, furioso, la enfrenta en una discusión cargada de tensión. El miedo paraliza a Cristina, quien siente que ha sellado su destino en la empresa. En ese entorno implacable, un paso en falso puede costar todo.

Don Pedro comienza a sentirse rodeado. Las investigaciones de Damián avanzan y lo empujan a recriminarle por haber permitido la entrada de Cristina en la fábrica. El conflicto con Irene estalla, y se abren heridas que dejan entrever secretos aún más profundos de lo que imaginaban. Irene, por su parte, descubre que Pedro siempre supo dónde estaba su hija, y esa traición la destruye emocionalmente.

Cuando Manuela le cuenta a María que Raúl y Andrés se enfrentaron físicamente por sus palabras, María toma una decisión drástica: le pide a Raúl que se aleje definitivamente. Cree haber recuperado a Andrés y no piensa perderlo de nuevo. Pero lo que recibe a cambio es una verdad desgarradora: los médicos no ven mejoría. Aun así, Andrés le promete estar a su lado, buscar ayuda incluso fuera del país. Un gesto noble que esconde una angustia insoportable.

En medio del caos, Chema, el hermano de Carmen, llega desde Sevilla con sueños de reinventarse vendiendo enciclopedias. Su estrategia poco ética de aprovechar los lazos familiares provoca tensiones, especialmente con Tasio, quien ve claramente que Chema quiere instalarse sin aportar.

Las sospechas de Joaquín se intensifican, especialmente tras oír a Damián. Al conectar pistas y hablar con Andrés, descubre verdades incómodas: reuniones secretas, la posible farsa de la venta de la empresa, y su propia caída como director que, quizás, no fue casual. A Gema le cuesta creer su teoría, sobre todo cuando Joaquín plantea que pudo haber sido drogado antes de una reunión clave.

Gabriel llega a la casa de los De la Reina y su presencia despierta emociones contradictorias. Begoña se siente atraída, Marta muestra cierta simpatía, pero Pelayo y Andrés se mantienen alerta. Begoña intenta advertir a Andrés sobre la manipulación de María, pero él no lo cree… hasta que toma una decisión drástica: terminar la relación.

Raúl, conmovido, pide disculpas a Andrés y presenta su renuncia. Manuela intercede por él, pero Andrés lanza una pregunta demoledora: ¿hay algo más entre Raúl y María? La sospecha va creciendo.

Mientras tanto, Chema se propone vender diez enciclopedias en una semana. Carmen lo apoya incondicionalmente, sin ver sus verdaderas intenciones. En paralelo, Begoña cae emocionalmente tras su ruptura con Andrés, sintiendo que lo ha perdido frente a la sombra de María.

La intuición de Joaquín lo lleva a enfrentar a Irene directamente. Ella reacciona con nerviosismo cuando él menciona la noche en que bebió aquella copa… ¿fue intencional? Irene, cada vez más cercana a Cristina, le aconseja pedir disculpas a Luis. Él, reconociendo también sus errores, le propone trabajar juntos en un nuevo proyecto.

Las piezas comienzan a encajar. Joaquín gana una inesperada aliada en Gema. Damián presenta a Gabriel en la fábrica, pero la tensión con Tasio es inmediata. Tasio, herido y desplazado, le revela a Gabriel su verdadero vínculo familiar, y la fractura se ahonda.

Raúl se despide de María, pero ella lo detiene. Le confiesa sus sentimientos. La manipulación emocional es sutil, pero demoledora. Pelayo, siempre observador, nota algo raro entre Tasio y Gabriel. Begoña alerta a Damián sobre el estado emocional de Andrés, y él, finalmente, toma cartas en el asunto. Visita a María y le deja una advertencia: si sigue interfiriendo, terminará en una residencia.

Gabriel intenta acercarse a Tasio para reconciliarlo con Damián, pero solo consigue más rechazo. Andrés, indignado por las maniobras de su padre, habla con Begoña, quien lo sorprende al sugerir que María necesita ayuda profesional. Andrés lo percibe como una traición más.

Joaquín cuenta a Digna la verdad sobre Gabriel, pero ella duda que su difunta hermana supiera de su existencia. Andrés intenta volver al trabajo, pero María lo manipula emocionalmente una vez más para retenerlo.

Begoña y Luz vuelven a acercarse, aunque Luz teme su próxima revisión médica. Julia es la única que logra consolar a Begoña. Gema, preocupada por su amiga, insiste en que vaya al cardiólogo, pero Luz evita el tema. Mientras tanto, Marta le da a Luis una noticia ambigua: Cobeaga ha elegido su empresa para el nuevo perfume, pero quiere supervisar todo. Durante la visita, el diseñador conoce a Pelayo, y entre ellos hay una química evidente.

En la colonia, Digna intenta justificar las acciones de Pedro, pero sabe que el embate de Damián será difícil de detener. Marta y Pelayo confrontan a Gabriel. Él logra conquistar a Marta con su carisma, pero Pelayo mantiene sus reservas.

Damián, cansado de ver a Andrés arrastrarse, visita a María con una amenaza velada. María se siente satisfecha: su plan parece estar funcionando. Sin embargo, Chema aparece con malas noticias: ha sido despedido. Carmen se enfurece, pero en lugar de culparlo, promete ayudarlo.

Gema sigue investigando aquella noche en la que Joaquín perdió el control. Irene evita responder. María, más segura en su rol de víctima, provoca a Begoña descaradamente, sabiendo que Andrés la respalda.

Irene y Cristina se acercan. Irene le asegura que su perfume es excelente, sin imaginar que el lazo entre ellas es más profundo de lo que creen.

En otro giro, Pelayo, ambicioso, se alía con Marta para asistir a una cacería con figuras influyentes. Pero durante una tormenta, el apagón le da a Gabriel la oportunidad perfecta para registrar la casa. Encuentra documentos comprometedores y, en una charla con Irene, extrae información valiosa.

Gema y Luz discuten cuando esta última falla a su cita médica. Su amistad sufre, marcada por secretos y heridas aún abiertas. Todos los personajes siguen navegando en una marea emocional, entre lo que ocultan, lo que desean, y lo que el destino, caprichoso, les depara.

Porque en Sueños de Libertad, cada semana es un laberinto de emociones, decisiones y verdades a punto de estallar… y esta no es la excepción.