Kaya muestra su verdadera cara con Seyran… el próximo domingo en ‘Una nueva vida’.

Ferit e Ifakat fracasan al intentar desenmascarar a Nukhet ante Halis. La mujer tenía un plan b por si algo así llegaba a ocurrir… Pero su doble cara va mucho más allá: descubrimos su locura y su alianza oculta con el hermano de Zerrin.

Kaya muestra su verdadera cara con Seyran… que no tarda en darse cuenta de que el nieto de Halis actúa como un psicópata. Pero Suna no quiere escucharla… ¿Conseguirá salvar a su hermana mientras su matrimonio se derrumba?

‘Una nueva vida’ se ha convertido en una de las series turcas más exitosas a nivel internacional en las últimas temporadas, conquistando a espectadores de más de 120 países.

La historia gira en torno a Seyran y Ferit, dos jóvenes atrapados en un matrimonio concertado por sus poderosas familias. Afra Saraçoğlu y Mert Ramazan Demir protagonizan esta apasionante ficción.

Las familias Korhan y Sanli, unidas por un vínculo cargado de amor, rencor y traiciones, se enfrentan al peso de las tradiciones y al deseo de romper con ellas. La serie pone el foco en la fuerza de los lazos familiares, los secretos que asfixian a quienes los guardan y el dominio de unos patriarcas que imponen su voluntad sobre el destino de todos los miembros de la familia.

Capítulo 45 de ‘Una nueva vida’, domingo 20 de julio en Antena 3

En el capítulo 45 de ‘Una nueva vida’, las mentiras acumuladas empiezan a mostrar sus consecuencias. Seyran recibe unas fotografías de Ferit besando a otra mujer y, destrozada por la supuesta traición, decide regresar a la mansión sin saber quién las dejó sobre la mesa. La incertidumbre y la rabia marcan su regreso.

Mientras tanto, Nükhet convierte el caos en una oportunidad. Entre lágrimas, se encierra en su habitación y acusa a todos de su desgracia. Le muestra a Halis el cheque que usó con Taylan y anuncia, entre lamentos, que abandona definitivamente la casa. Su marcha deja a la familia aún más desestabilizada.

Sin embargo, la sorpresa la da Kaya al negarse a acompañar a su madre. Anuncia que se quedará en la mansión y, además, que quiere casarse con Suna. En medio de la conmoción por la salida de Nükhet, Halis decide que esa misma noche se celebrará el compromiso.

Seyran no tarda en confrontar a Ferit con las fotos. Se las lanza al rostro, llena de dolor, acusándolo de traición. Ferit mantiene la calma y asegura que todo es un montaje. Promete descubrir quién está detrás. Kazım escucha la discusión y, furioso, irrumpe exigiendo una explicación.

Tras la salida de su padre, Seyran sigue alterada, pero Ferit insiste en que demostrará su inocencia. En paralelo, Kazım revisa las fotos y, sin decir una palabra, se aleja visiblemente perturbado. Ferit acude a Taylan para obtener respuestas, pero al no conseguirlas, se encamina hacia Pelin.

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Seyran, cada vez más decidida a defender a su hermana, encara a Ifakat y le exige que se mantenga al margen de sus vidas. Poco después, se anuncia oficialmente el compromiso entre Suna y Kaya, lo que desata nuevas sospechas en Seyran. Inmediatamente, busca a Kaya para enfrentarlo.

El encuentro entre Seyran y Kaya se convierte en una confrontación cargada de tensión. Él se burla, insinúa que Seyran tiene celos y llega incluso a provocarla físicamente. Ella reacciona con una bofetada. Suna presencia la escena, malinterpreta todo y se pone del lado de Kaya, rompiendo el vínculo con su hermana.

Herida por la reacción de Suna, Seyran le desea felicidad y se aparta. Kazım entra y exige explicaciones. Suna asegura que su hermana se opone a la boda, lo que provoca un nuevo reproche por parte del patriarca hacia Seyran, instándola a centrarse en su matrimonio.

Ifakat, sabiendo que Ferit se reunirá con Pelin, manda a alguien a seguirlos. Al mismo tiempo, Seyran recibe una llamada de alguien vinculado a Pırıl con información sobre su esposo. Aunque duda, decide acudir al encuentro con la esperanza de aclarar la verdad.

En otro escenario, Şehmuz descubre que Pelin está embarazada de Ferit y, enfurecido, los cita a ambos. Sin saberlo, Seyran los sigue en taxi hasta la casa del hombre, presintiendo que está a punto de destaparse el último gran secreto.

Allí, Şehmuz lanza un ultimátum: Ferit debe elegir entre divorciarse de Seyran y casarse con Pelin, o desaparecer para siempre. Si decide hacer su voluntad, lo arrastrará con él. Ferit, incrédulo, se toma la amenaza a la ligera… sin imaginar que Seyran ya está más cerca que nunca de conocer la verdad.