La semana del 9 al 13 de junio promete ser una de las más intensas en La Promesa, marcada por giros dramáticos, tensiones entre personajes clave y un inquietante descubrimiento que podría acercar a todos a una verdad largamente enterrada: lo que realmente ocurrió con la muerte de Jana. Aunque esta semana tendrá una emisión menos por el partido de fútbol entre Eslovaquia y España Sub-21 (no habrá episodio el miércoles), los días lunes, martes, jueves y viernes estarán cargados de emociones.

Lunes 9 de junio: Curro obligado a pedir perdón, Toño sigue firme, y Pía recupera su lugar

La tensión entre Curro y don Lisandro se convierte en un tema de honor para Alonso, quien exige que su hijo se disculpe tras haberle hablado de forma inadecuada. Curro, herido, accede, pero no puede ocultar su dolor y se lo reprocha al marqués con una mirada cargada de resentimiento. A la vez, Manuel logra saldar la deuda de Toño gracias al dinero de Leocadia y trata de convencerlo de luchar por su familia. Sin embargo, Toño se niega a prometer algo que ya no siente posible.

Por otro lado, Adriano, aún recuperándose de la operación tras el bautizo, regresa al palacio para seguir con su reposo. Su recuperación marcha bien, pero el ambiente aún está cargado de tensión. En paralelo, Leocadia reprende a Catalina y Martina por haber despedido a Petra sin consultarle, lo que obliga a Alonso a intervenir y exigir a las jóvenes respeto por la autoridad de la señora. Mientras tanto, una inesperada noticia sacude al servicio: Pía ha sido restituida como ama de llaves. Su regreso se recibe con alegría, como el augurio de mejores tiempos.

Pero la intriga apenas comienza: Ricardo encuentra una pulsera con una esmeralda —la misma que Lope y Curro compraron en la joyería Yop— y se la muestra a Rómulo. Éste le ordena investigar su procedencia, lo que da pie a una inquietante “caza de brujas” entre el personal, aunque sin resultados inmediatos. Lope, que había regalado la joya a Vera, teme que su secreto esté a punto de salir a la luz.

Curro, destrozado por la reciente muerte de Eugenia, es presionado por Rómulo para que retome su trabajo. Una orden del marqués que lo obliga a tragarse el duelo en silencio.

Martes 10 de junio: Dolor, mentiras y decisiones inesperadas

El dolor de Curro por la muerte de su madre no cede. Solo Ángela parece capaz de tocar esa herida con ternura. Pero no todos aprueban esa cercanía. Mientras tanto, Adriano continúa su recuperación, pero no todos están de acuerdo con las decisiones que Emilia y Catalina toman respecto a él. Algo se cuece entre ellos y no le agrada al joven.

Samuel sigue empeñado en saber el paradero de Petra, aunque la indiferencia general le causa frustración. Mientras tanto, Lisandro sorprende con un giro radical en su actitud hacia Adriano, anunciando que desea obsequiarle algo personal. A la par, Pía elabora una excusa —alegando que la misteriosa pulsera de esmeralda es un regalo suyo— para recuperarla sin levantar sospechas. ¿Caerá Ricardo en esa trampa?

Jueves 12 de junio: Secretos, cartas y un inquietante descubrimiento

El jueves, los secretos comienzan a desmoronarse. Manuel le confiesa a Simona que ha descubierto que Toño y Norberta no están legalmente casados. La cocinera, impactada, se lo comunica a Candela, abriendo la puerta a nuevos escándalos.

Leocadia, cada vez más vigilante, recrimina a Ángela el abrazo que le dio a Curro. Esto provoca otra intervención de Alonso, quien exige a su hijo que se aleje de la joven. Por su parte, Lisandro sigue manteniendo en secreto su plan para agradecer a Adriano, mientras este opta por evitarlo. Catalina y su marido están a punto de quedarse sin palabras cuando descubran cuál es ese obsequio.

Rómulo y Emilia finalmente revelan ante Pía y Ricardo que han decidido darse una oportunidad como pareja. Mientras tanto, Manuel y Toño reciben una carta misteriosa… ¿Quién la envió? ¿Qué contiene?

Pía se adentra en el despacho para recuperar la pulsera que compró en la joyería Yop junto a Lope, pero lo que encuentra allí la deja petrificada: un descubrimiento que puede cambiarlo todo. Algo que la acerca peligrosamente a la verdad tras la muerte de Jana y el veneno escondido en la joya.

Samuel asegura que no fue Petra quien envió la carta que lo delató, pero no aclara más y evita a sus compañeros. María Fernández lo encara, y él le hace una revelación inesperada que podría darle un giro radical a la historia.

Viernes 13 de junio: Verdades que salen a la luz, decisiones drásticas y un regalo inquietante

El viernes, la revelación golpea con fuerza: el verdadero culpable de la excomunión de Samuel no es quien María Fernández pensaba. La doncella exige que el sacerdote cuente toda la verdad al servicio, y esa confesión puede cambiar muchas relaciones dentro del palacio.

Lope, Curro y Pía, decididos a desentrañar la verdad sobre la misteriosa joya envenenada, toman una decisión arriesgada: probar el químico para confirmar si realmente contiene cianuro. El riesgo es enorme, pero sienten que es la única manera de acercarse a la verdad sobre Jana.

Lisandro, por su parte, sigue firme en su propósito de agradecer a Adriano. Pero cuando Catalina y su esposo descubren qué tipo de obsequio tiene preparado el duque, quedan absolutamente impactados. ¿Será una oferta tentadora… o una trampa envuelta en seda?

Los cocineros, observadores por naturaleza, le comentan a la enfermera que han notado un comportamiento extraño en Rómulo. La relación entre él y Emilia empieza a generar suspiros y rumores en el servicio.

Finalmente, Leocadia, harta de los gestos de complicidad entre Ángela y Curro, toma una decisión demoledora para la joven. Una medida que podría cambiar su destino en La Promesa para siempre.

Conclusión: una semana decisiva

La semana del 9 al 13 de junio en La Promesa será clave para desenmascarar a varios personajes y acercarse al oscuro secreto que rodea la joya de esmeralda y la muerte de Jana. Entre alianzas rotas, amores perseguidos y una verdad envenenada que amenaza con salir a la luz, el palacio se convierte en un hervidero de tensión. Las decisiones que se tomen ahora marcarán el rumbo de todos los personajes.

Y aunque habrá un día sin emisión, la intensidad de los capítulos restantes compensará con creces cualquier ausencia. Porque en La Promesa, cada silencio, cada joya, y cada mirada encierra un secreto… y esta vez, puede que la verdad esté más cerca que nunca.