¡Se respira un aire especial en La Promesa! A pesar de las sombras que proyecta Leocadia con cada paso que da, hay luz, hay amor… y hasta celebraciones. Porque sí, aunque parezca increíble, entre conspiraciones, secretos y traiciones, los corazones también palpitan con fuerza en esta historia que nos tiene a todos enganchados.
Y como no podía ser de otra manera, hoy nos centramos exclusivamente en la serie. Sin desvíos históricos, sin menciones reales o ficciones externas. Solo La Promesa, pura y vibrante. ¡Vamos al grano, que hay mucho que comentar!
El beso que lo cambia todo: Curro y Ángela, la pareja estrella
Por fin se consolidó lo que tantos deseábamos. ¡El beso entre Curro y Ángela! Esa escena cargada de ternura y electricidad nos confirma lo que ya era un secreto a voces: esta pareja está destinada a brillar. Desde sus primeras apariciones, la conexión entre ellos ha sido innegable, y el trabajo actoral detrás lo potencia aún más. Marta Costa, interpretando a Ángela, se luce. Y sí, tal vez sea uno de sus primeros papeles largos, pero el talento le sobra. La química con Curro (Shav Lock) es potente, y sus escenas con Isabel Serrano (Leocadia) son dinamita pura.
Ángela no se deja manipular fácilmente. Aunque su madre intente envolverla en sus redes oscuras, ella no se fía ni un pelo. Sabe que Leocadia siempre esconde una segunda intención. Esta lucidez es refrescante, especialmente si la comparamos con la relación entre Manuel y Cruz en su día. Ángela tiene los pies en la tierra, y eso puede ser clave para que su historia con Curro sobreviva los embates que seguro vendrán.
Cumpleaños, horóscopos y ¿denuncias?
Entre tanto drama, también hay tiempo para una sonrisa. Se acerca el cumpleaños de Lorenzo y, aunque no sea el personaje más querido, no deja de ser un motivo de comentario. Algunos ya han apuntado que es Tauro, y claro, eso desata todo tipo de debates astrológicos. Pero más allá de los signos, lo que muchos se preguntan es: ¿qué regalarle a Lorenzo?
Las opciones son variadas: desde una visita de su mujer hasta una buena denuncia por desfalco militar. Porque no olvidemos que este hombre tiene trapos sucios de sobra, y Leocadia podría usarlos en su contra cuando le convenga. Si no has visto el vídeo donde se desgranan esas irregularidades, te estás perdiendo una joya.
El arte de la manipulación: Leocadia recompra las obras de los Luján
Leocadia vuelve a mover ficha. En un acto aparentemente generoso, recompra las obras de arte que la familia Luján había empeñado: cuadros, esculturas… todo vuelve a casa. Pero todos nos hacemos la misma pregunta: ¿qué busca realmente? Porque si algo hemos aprendido es que Leocadia no da puntada sin hilo. Ángela lo intuye, Curro lo sabe, y nosotros también: detrás de ese gesto hay una jugada maestra por revelarse.
El famoso jarrón vendido al conde sigue siendo tema de debate. Tranquilos, ese jarrón tan feo (pero valioso) parece seguir a salvo. Ni Leocadia se atrevió a tocarlo. No se puede jugar con los caprichos de la nobleza, ¿verdad?
Leocadia, hipocresía en estado puro
Una de las grandes contradicciones del personaje más temido de la serie: Leocadia acusa a Curro de ser un bastardo, mientras su propia hija —Ángela— también nació fuera del matrimonio. Pero claro, para ella todo tiene matices. En su mente, la reputación de Ángela está en juego. No puede permitir que se junte con alguien como Curro, aún más marcado por el escándalo. Porque no solo es hijo ilegítimo: es el fruto de un crimen, de una criada asesinada, de un robo de identidad brutal. Curro no es cualquier hijo secreto; es el corazón de una tragedia. Y eso, en ojos de Leocadia, lo vuelve inaceptable.
Ana se va… por la puerta de atrás
Sin previo aviso, Ana desaparece. Pellicer la acusa del secuestro de Dieguito, ella lo niega, no hay pruebas, pero igual se esfuma. Una salida extraña, casi anticlimática para un personaje que ha estado presente en tantos capítulos. De hecho, más que figuras que en su momento parecían centrales, como la varonesa de Grazalema o Fernando, el hermano del marqués.
Aun así, su huida deja un vacío. Y se suma la incógnita: ¿Santos se va con ella definitivamente? ¿Volverán? ¿O será esta otra historia inconclusa más en el universo de La Promesa?
Simona y Manuel: una alianza que emociona
Una de las tramas más emotivas y sorprendentes de los últimos días es la conexión entre Simona y Manuel. Él, un noble con alma sensible; ella, una mujer del servicio con una vida marcada por la lucha. Juntos, están construyendo una relación de respeto y apoyo mutuo. Manuel parece decidido a convertirse en el protector de los suyos. Primero fue Simona (y su hijo Toño), ¿quién será el siguiente?
Se abre una puerta preciosa: Manuel como una especie de “ángel de la guarda” del servicio. ¿Le seguirá tocando el turno a Pía, a Candela, a Rómulo…? Este enfoque, más humano, más social, led a una nueva dimensión a su personaje.
En definitiva, el episodio reciente de La Promesa ha sido una montaña rusa emocional. Entre besos inesperados, tensiones familiares, cumpleaños sin pastel y despedidas silenciosas, la serie sigue demostrando que su fortaleza está en su capacidad para entrelazar lo íntimo con lo épico.
Y sí, aunque Leocadia siga lanzando sombras desde las alturas, hay amor en el aire. Hay nuevas alianzas, y hasta motivos para brindar (aunque sea con agua). Porque incluso en los rincones más oscuros del palacio, las historias de amor —y de redención— siguen floreciendo. Y eso, promisers, es lo que hace de La Promesa una historia que no deja de sorprendernos.
Nos vemos mañana con más crónicas, más emociones… y más fuego.
¿Te gustaría que prepare un avance especial para el próximo capítulo o un enfoque más profundo sobre Curro y Ángela?